Tener un cálculo renal es una afección médica potencialmente grave, por lo que es esencial saber si podría sufrirlo.
¿Qué causa los cálculos renales?
Los cálculos renales son depósitos duros de minerales y sales que se acumulan en los riñones. Pueden viajar al tracto urinario y afectar la vejiga y los riñones. La mayoría de las veces, se forman cuando la orina se concentra.
Los cálculos renales pequeños generalmente no causan síntomas. Los más grandes se vuelven dolorosos. Algunas piedras pasan por sí solas sin intervención médica. Sin embargo, es posible que necesite cirugía para extraer cálculos más grandes que no pasan.
Los síntomas de los cálculos renales:
1. Dolor en el vientre, el costado o la espalda
El cólico renal, también conocido como dolor por cálculos renales, es uno de los tipos de dolor más intensos. Es lo suficientemente intenso como para representar más de un millón de visitas a urgencias por año. Algunos han comparado el dolor de cálculos renales con una puñalada con un cuchillo o con el parto.
El dolor de tener un cálculo renal, que generalmente comienza de repente, comienza cuando el cálculo se abre paso hacia el uréter estrecho. El bloqueo produce dolor y acumulación de presión en el riñón. El dolor cambia de intensidad y ubicación a medida que se mueve el cálculo. Viene y va en ondas y se intensifica a medida que los uréteres se contraen. Las ondas de dolor pueden durar unos minutos, desaparecer y luego regresar.
El dolor puede sentirse en la espalda, a lo largo de los costados e incluso debajo de las costillas. Puede extenderse a la ingle y el área abdominal a medida que el cálculo avanza por el tracto urinario.
2. Sensación de ardor o dolor al orinar
Comenzará a sentir dolor al orinar tan pronto como el cálculo llegue a la unión entre la vejiga y el uréter. Puede experimentar punzadas de dolor agudo y ardiente.
3. La necesidad urgente de orinar
Una vez que el cálculo se haya trasladado al tracto urinario inferior, sentirá una necesidad urgente o frecuente de orinar.
4. Orina maloliente o turbia
La orina sana no tiene un olor fuerte. La orina con mal olor puede ser un signo de una infección renal o del tracto urinario. La turbidez en la orina indica que hay pus presente.
5. Sangre en la orina
La sangre puede ser roja, marrón o rosada. La presencia de sangre en la orina (también conocida como hematuria ) no siempre es visible a simple vista, pero puede verse a través de un microscopio.
6. Náuseas y vómitos
El riñón tiene conexiones nerviosas compartidas con el tracto gastrointestinal, y los cálculos renales pueden desencadenar estos nervios y provocar malestar estomacal. Además, los vómitos también pueden ser la respuesta de su cuerpo al dolor intenso.
7. Escalofríos y fiebre
Cualquier forma de fiebre con dolor debe ser examinada por un médico. La fiebre junto con los escalofríos pueden indicar que tiene una infección en el tracto urinario o en el riñón. Tenga en cuenta que la fiebre que acompaña a una infección es inusualmente alta y se acompaña de escalofríos.
Tenga en cuenta que siempre es una buena idea buscar atención médica si tiene dolor o si sospecha que padece una afección médica. Para obtener más información, no dude en ponerse en contacto con nosotros.